Nace en la ciudad de México en 1965. Logró transformar su infancia, que llegó a situación de calle, en una vida consagrada al arte para ayudar a otros niños que han pasado por lo mismo.
Su pasión por el arte nació tras contemplar una exposición de Edward Munch en el Centro Cultural Arte Contemporáneo en Polanco. Aunque su formación es prácticamente autodidacta, Correa asistió y colaboró con maestros destacados como Gilberto Aceves Navarro, Luis Nishizawa y Mariano Villalobos.
Destaca su presencia en más de 150 exposiciones tanto en México como alrededor del mundo. En el año 2000 recibió el Premio Italia por el Arte en la Vitrina de Artistas Contemporáneos en Florencia, Italia.
Destaca por su labor humanitaria con talleres de dibujo y pintura dirigidos a los niños tarahumaras en Chihuahua, así como en museos de Japón y Estambul. Ha donado murales a hospitales infantiles en la ciudad de México, Monterrey y Estado de México.
Su obra es reconocida por su estilo figurativo contemporáneo con un uso intenso del color, evocando mundos llenos de fantasía, inocencia y magia.